Su hija hizo un dibujo para ayudarlo a conseguir trabajo, se viralizó y cambió su suerte
Tras quedar sin trabajo en pandemia, un hombre se dedicó a la jardinería. Preocupada por la difícil situación económica que atraviesa su familia, su hija de 9 años, ideó una estrategia publicitaria que tuvo una inesperada repercusión.
Gustavo Díaz oriundo de Laferrere, provincia de Buenos Aires, quedó desempleado en plena pandemia y su hija mayor, Mailén, tuvo un acto de cariño que se volvió viral: realizó un dibujo para que su papá pueda conseguir trabajo.
El hombre intentó con unas changas, pero con la cuarentena estricta fue prácticamente imposible. Luego, con la flexibilización de las medidas, decidió probar suerte con la jardinería pero no ganaba lo suficiente para subsistir.
“Salía todas las mañanas a caminar por el barrio, a tocar timbre para ofrecer mis servicios. Pero como mucha de esa gente no me conocía, le daba miedo y ni siquiera me atendía. Me pasó de estar todo el día buscando trabajo y no poder traer ni un peso para darle de comer a mis hijas”, recordó Gustavo Díaz a Infobae.
Incluso, contó que en un oportunidad se encontró con un hombre mayor que estaba en una peor situación que él y decidió regalarle los únicos 100 pesos que había ganado porque consideró que los necesitaba más.
“Veo que la casa tenía el pasto de la vereda re contra largo. Golpeo la puerta y sale un viejito que me explica que ni siquiera tenía plata para comer. Me dio tanta tristeza que terminé haciéndole el trabajo igual y encima regalándole mi plata”, relató el hombre ya que es muy creyente y está convencido de que «hay que ayudar al prójimo».
“Escuché hablar a mi papá y a mi mamá. Decían que tenían que juntar 500 pesos para comprarle una desmalezadora a nafta que vendía un vecino y se me ocurrió hacer un dibujo para promocionar el trabajo de mi papá, como se hace con esos panfletos que se reparten en la calle”, contó Mailén.
Todos los días, Gustavo sale a cortar pasto en su moto y su hija sale a la calle para despedirlo y desearle suerte.
“Cuando me regaló el dibujo sentí una satisfacción enorme. Fue el 29 de diciembre al mediodía. Se me ocurrió compartirlo en mi Facebook y subirlo a otros grupos donde la gente del barrio ofrece su trabajo o vende productos sin saber todo lo que vendría después”, admitió el hombre. La publicación tuvo una repercusión enorme y hasta se compartió hasta en otras redes sociales, como Linkedin y Twitter.
“Me contactó hasta gente de Tucumán, Santa Fe y Santiago del Estero… fue una locura lo pasó”, admitió Gustavo, quien no solo recibió llamados laborales sino ofrecimientos de todo tipo que al día de hoy no paran de sorprenderlo.
“El jueves 31 hice tres jardines enormes, solo en la mañana. En un momento tuve que apagar el celular porque me seguían convocando y tenía que volver a mi casa para festejar el Año Nuevo”, se enorgulleció frente a la recaudación lograda en apenas medio día.
“Nunca en mi vida recibí tantos mensajes por las fiestas. Hasta me saludó gente que ni conozco. Cada vez que abro el Whatsapp me encuentro con decenas de mensajes. Gracias a mi hija me hice re famoso”, finalizó.