Por ahora, Anses permanecerá con una «intervención técnica» en Salta
Tras la salida de Marcos Vera y Susana Aramayo las jefaturas del organismo nacional estarán ocupadas, momentáneamente, por Ana Ibarguren y Cecilia Isasmendi, dos trabajadoras de carrera, apoyadas y monitoreadas desde Buenos Aires.
Las esperadas renuncias de Marcos Vera y de Susana Aramayo como gerentes de las unidades de atención de Anses en Salta trajeron algo de paz al caos que reinaba allí. Denuncias mediáticas, en las redes sociales, en el Concejo Deliberante, en la Legislatura provincial y hasta en la Defensoría del Pueblo de la Ciudad fueron los motivos de los pedidos de renuncia que realizó la directora ejecutiva de ese organismo a nivel nacional, Fernanda Raverta.
La visita de la funcionaria. junto al ministro del Interior, Eduardo De Pedro, sirvió para conocer de primera mano algo de lo que venía sucediendo. Denuncia de maltrato al personal, reclamos de la gente que estaba en la UDAI y una caótica rueda de prensa fueron motivos más que suficientes para pedir que Vera y Aramayo dejen sus cargos.
Luego de las salidas de los ahora exfuncionarios, y solo por el momento, las jefaturas en las Udai local estarán ocupados por personas de carrera en las dependencias locales del organismo, Ana Ibarguren y Cecilia Isasmendi, apoyadas y monitoreadas desde Buenos Aires.
La «intervención técnica» del organismo nacional buscará normalizar las oficinas locales antes de nombrar a quienes asuman las conducciones. Según indicaron fuentes nacionales, la intervención podría llevar un tiempo.
