En Salta la Justicia decide sobre los cuerpos de las mujeres
El juez Tomás Méndez Curutchet hizo lugar a la demanda de un hombre y frenó el aborto de una joven. Convocó a una audiencia al progenitor y a la mujer gestante.
La Justicia salteña parece seguir regida con prejuicios que atentan contra la normativa nacional vigente y desoye derechos que las mujeres conquistaron. Ahora el juez provincial en lo Civil y Comercial de Primera Instancia Tomás Méndez Curutchet dio lugar a un amparo y prohibió que una joven se realice una interrupción voluntaria del embarazo (IVE), práctica permitida por la ley provincial 27.610, aprobada por el Congreso de la Nación en diciembre pasado.
El polémico juez tomó esta decisión porque lo pidió el progenitor “en representación de su hijo o hija por nacer”.
Con una rapidez inusitada, el Ministerio de Salud emitió un memorándum a los responsables de las áreas operativas de la provincia para que den “estricto cumplimiento” a lo que dispuso el juez y la mujer no acceda a la interrupción del embarazo en ningún hospital, pese a su derecho de elegir no continuar con el embarazo.
“Resuelvo ordenar, bajo responsabilidad del peticionante y, previa contracautela, la medida de prohibición de innovar para que la Srta. … y la Provincia de Salta se abstengan de realizar cualquier práctica que pudiera interrumpir el embarazo hasta que se dicte sentencia definitiva y la misma se encuentre firme”, señala la resolución firmada por Méndez Curutchet.
Ahora el juez pretende que este 11 de junio haya una «conciliación» para la continuidad de ese embarazo, pese a que la mujer ya decidió realizarse la IVE.
Cabe destacar que, al ser el derecho a la IVE una normativa nacional, la Justicia provincial no tiene competencia. La polémica maniobra del magistrado trataría de «ganar tiempo» y que la mujer llegue hasta la semana 14 de embarazo, lo que volvería impracticable el aborto, ya que la ley sólo lo habilita hasta ese momento. Otro bochorno más de la Justicia salteña.