Cuatro años después, el crimen de Jimena Salas sigue sin respuestas
Hoy se cumple el cuarto aniversario del asesinato de la joven en Vaqueros y todavía hay mucha incertidumbre. Hoy habrá una marcha, desde las 19 en Plaza 9 de julio, pidiendo a la Justicia salteña celeridad en la resolución del crimen.
El 27 de enero de 2017, en el interior de su vivienda en la localidad de Vaqueros, fue asesinada de 40 puñaladas Jimena Salas, una mujer de 44 años y madre de mellizas. Pese a que en junio se llevará a cabo el juicio contra dos acusados, el caso todavía genera mucho desconcierto en sus familiares y amigos y en el conjunto de la sociedad.
Aquel 27 de enero, Jimena salió temprano de su vivienda, junto a su marido Nicolás Cajal, hoy imputado en la causa y acusado de «encubrimiento«. Según el expediente, Salas fue a tomar clases de natación.
Jimena regresó a su domicilio antes de las 11 a encontrarse con sus dos hijas que habían quedado con una niñera. Mantuvo un contacto telefónico con Cajal para avisar que estaba de regreso.
A las 12.40, aproximadamente, y según el expediente, un hombre tocó la puerta de su casa con la excusa de encontrar al dueño de un caniche toy supuestamente perdido en la cuadra de Jimena. El sujeto, aparentemente acompañado de un cómplice, empujaron a la dueña de casa hacia adentro de la vivienda y le dieron 40 puñaladas mortales.
Las hijas de la pareja fueron dejadas en el baño y se cree que al menos una de las mellizas presenciaron el crimen de su madre.
Marcha
Amigas de Jimena Salas marcharán esta tarde por Plaza 9 de Julio para pedir celeridad con la resolución del caso.
“Vamos a reunirnos en la plaza para marchar y pedir justicia por el brutal crimen de nuestra amiga. Ya pasaron cuatro años sin que los autores del homicidio estén presos”, aseguró Cecilia Barbas, una de las amigas de la víctima.
Según Nuevo Diario, Barbas dijo que le interesa «la verdadera justicia y que se llegue a los verdaderos responsables”. Hasta el momento, Horacio Vargas se encuentra detenido. La fiscalía lo acusó de haber participado de manera secundaria en el crimen. El otro imputado es el viudo de Salas, Nicolás Cajal, acusado de encubrimiento.
«Jimena, además de ser una gran mamá con muchas ganas de vivir, era una muy buena escritora, y para que la gente la conozca un poco más, vamos a entregar algunos trabajos de ella”, anticipó la mujer, y adelantó que el 8 de marzo se inaugurará una biblioteca con el nombre de Jimena Salas.
