Allanaron la casa de la concejal de la UCR que robaba donaciones que eran para wichís
La Justicia ordenó retirar todos los elementos que la edil radical de Tartagal, Paola Díaz y su hermana, la defensora civil Rosa Díaz, tenían en un depósito junto a su casa. La concejal pretendía utilizar las donaciones en el marco de su campaña como candidata a diputada.
Por orden de la Justicia, la Policía provincial allanó el domicilio en donde la concejal de la Unión Cívica Radical de Tartagal, Paola Díaz y su hermana la defensora civil Rosa Díaz acopiaban mercaderías que les llegaba en forma de donaciones desde distintas fundaciones para ser distribuidas en las comunidades wichís de la zona.
Varias camionetas debieron ser utilizadas por miembros de la fuerza de seguridad para llevar la gran cantidad de mercadería que habían acumulado.
La denuncia fue realizada por Sandra Díaz, hermana mayor de las acusadas, y aseguró que una parte de la mercadería era para utilizar en la campaña electoral y otra era vendida por las acusadas en la zona de residencia.
Ropa, agua, elementos de higiene y de limpieza formaban parte de las distintas donaciones que ambas lograron recaudar. También secuestraron algunos otros elementos que son útiles para la causa que se está llevando adelante.
En campaña
Según Sandra la denunciante, la radical Paola Díaz iba a utilizar parte de esas donaciones para distribuir en la campaña que la iba a tener como protagonista, ya que iba a competir en las elecciones provinciales como candidata a diputada provincial. Si bien Díaz obtuvo una banca por el partido Ahora Patria de Alfredo Olmedo, al poco tiempo de asumir pegó el salto a las huestes del radicalismo.
Al parecer, sería una de las apuestas del radicalismo que conduce el intendente y máximo dirigente de la UCR de Tartagal, Mario Mimessi. Este año el radicalismo del departamento San Martín debe renovar la banca que obtuvo el ahora Jefe comunal en 2017.
Según denunciaron los caciques wichís que hoy se movilizaron al domicilio de Paola Díaz a reclamar que les den las donaciones, Díaz fue hasta las comunidades en la campaña anterior y nunca más la vieron. Nadie la vio el año pasado, en el marco de la emergencia socio-comunitaria que atraviesan -todavía- las comunidades originarias.
Ahora el radicalismo tartagalense deberá hacer malabarismos para mantener algo de credibilidad, ya que este caso es el escándalo más grande de los últimos tiempos en Tartagal